"Sólo hay felicidad donde hay virtud y esfuerzo serio, pues la vida no es un juego."Aristóteles.
Un cielo límpido te envuelve. Es de un azul radiante, como nunca antes lo viste... y sentiste. El Sol, más inmenso y refulgente, imposible. Toda esa luz mágica te envuelve y traspasa por completo. ¡Nunca fuiste tan feliz!
El verde del prado es intenso, irresistible a la vista y reaviva emociones sublimes. El viento es suave, fresco y agradable. Flores de colores imposibles por doquier. Árboles de amplias copas y de sombras acogedoras complementan este paisaje divino.
Vuelves a ser joven y flotas sereno, danzas pleno de alegría y meditas en profunda paz. ¡Nunca habías sonreído tan sentido, más que con labios y rostro, con el corazón!
Tus ancestros están todos allí y miles y miles de seres que transitaron hace años y años atrás, ahora te saludan todos y te dan la bienvenida. Al verte, tu gracia y carisma les atrapan. Esos dones siempre y por siempre serán tu marca. Ese eres tú.
Y ahora, a caminar hacia el Padre, porque te espera para compartir inacabables experiencias hermosas y todas placenteras al espíritu.
¡Nunca habías sido tan feliz! Y nosotros, desde aquí, contigo.
¡Hasta siempre!
No hay comentarios:
Publicar un comentario